Las famosas perlas de leche son más comunes de lo que creés! Te contamos todo sobre ellas.

Las perlas de leche duelen y mucho. En mi caso en las clases de lactancia no fue mencionado, el punto blanco o perla de leche parece un granito en el pezón. Se inflama cuando el bebé toma la teta y el dolor es realmente penetrante.

Pueden ser de origen traumático o bacteriano.

PERLAS DE LECHE DE ORIGEN TRAUMÁTICO:

Esto puede ocurrir cuando el bebé cierra la boca fuerte estando en el pecho, o tironea distraído mirando para otro lado, la perla aparece de inmediato luego del traumatismo. Para resolverlo recomiendan aplicar calor (el calor produce dilatación de los conductos y facilitará el vaciado posterior) y con una aguja estéril levantar la primer capita de piel y desobstruir el conducto de esta forma.

PERLAS DE LECHE DE ORIGEN BACTERIANO:

Suelen comprometer TODO el conducto, lo que vemos como un punto es la punta del iceberg. Pero tranquilas que también tiene solución, acudir al centro de salud donde usualmente se recomienda medicación apta para la lactancia y se resuelve el problema ( hacen un cultivo con muestras de leche que toman y recetan el antibiótico más adecuado para tratar la infección).

IMPORTANTE: no tirar la toalla en estos casos! Tienen solución! (se que es más fácil decirlo que hacerlo pero ánimo que se puede resolver en pocos días!)

Suele resolverse SOLA en 7 días desde que apareció.

El proceso sería:

  • Aparición de la perla de leche en el pezón
  • Transformación a pellejito de color blanco
  • Transformación a una costra que termina cayendo